Fue en la década de los ochenta cuando aparecieron los denominados como yuppies, del inglés Young Urban Professional; esto es, «Joven Urbano Profesionista».
Y, con su aparición, también surgió un síndrome que cada vez tendía a afectar a más personas: la adicción al trabajo.
Tal y como se conoce tras su aparición, sobretodo gracias a la gran variedad de estudios realizados al respecto, las personas que son adictas al trabajo suelen no soportar las vacaciones, padecen ansiedad y nerviosismo con cierta frecuencia, y tienden a llevarse a casa su trabajo casi prácticamente sin descanso.
Por ello, saber cómo identificar a un adicto al trabajo puede serte sumamente útil, especialmente si tienes dudas de que tú también puedes serlo.
Cómo identificar a un adicto al trabajo
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Aún estando en tiempo de ocio o descansando, no deja de hablar del trabajo.
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Tiende a llevarse de manera regular el trabajo a casa.
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No consigue relajarse. Siempre está ansioso o nervioso.
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Cuando no está trabajando puede sentirse irritado, cansado y con sentimiento de culpa.
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Se marca grandes retos y objetivos, sobretodo en el trabajo.
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Suele buscar de forma constante excusas para quedarse en el trabajo o en la oficina.
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Renuncia a cargas familiares.
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En cualquier actividad que desarrolle tiende a ser muy competitivo.
Imagen / gokoroko
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